En Manao, Brasil se reporta un toque de queda de once horas diarias en tras el colapso de todas las unidades de atención médica de la región por los excesivos contagios de Covid-19 en la población.

Las autoridades sanitarias han decidido enviar a sus pacientes a otras regiones del país tras haber sobrepasado la capacidad para atender a los enfermos; actualmente debaten sobre a quienes les pondrán oxígeno dependiendo de su nivel de gravedad.
La medida fue anunciada por Wilson Lima, el gobernador del estado de Amazonas, el mismo afirmó que en los hospitales de la región ya no hay capacidad para tantos contagiados, los cementerios están colapsados y que hay una falta demasiado grave en los cilindros de oxígeno, los cuales son indispensables para aquellos que están conectados a maquinas respiratorias.
Actualmente la región es lugar de origen de la nueva cepa del Covid-19, por lo que varios países han vetado los vuelos que provengan de la nación carioca y sus adyacentes.
Esto ha llevado a que el toque de queda restrinja el transporte colectivo en carreteras y ríos, junto a ellos los comercios deberán respetar el mismo horario con excepción de los centros de salud y los de seguridad; las farmacias están autorizadas a llevar medicamentos a domicilio.
Las cifras cada día aumentan dentro de Brasil, tras registrarse casi 5.800 muertes por el Covid-19; por su parte, el gobernador ha pedido ante un tribunal un recurso para garantizar más oxigeno de parte de la empresa que los abastece, a fin de poder atender a más personas.
Asimismo, el estado en acuerdo con el Ministerio de Salud ha pedido enviar a los menos afectados a otras ciudades a través de aviones de la Fuerza Aérea para poder descongestionar los hospitales.
El Gobernador Lima dijo “La Presidencia de la República está movilizada para ayudarnos a superar este momento lo más rápido posible. Estamos en una operación de guerra en la que los insumos, especialmente el oxígeno en los hospitales, son los productos más demandados ante la pandemia”.
Tan solo en un día, 198 entierros se hicieron dentro de la región; por otra parte los médicos admitieron que la falta de oxígeno les ha obligado a colocar el recurso a quienes tengan más probabilidades de vivir.