EFE
Nueva
Delhi, India
Un templo
hindú en el sur de la India ha reemplazado al elefante de carne de hueso por
uno mecánico para llevar a cabo sus ceremonias, en un intento por luchar contra el maltrato y la caza furtiva
de este animal, considerado sagrado por el hinduismo.
La
novedosa iniciativa, llevada a cabo en un templo hindú del estado sureño de
Kerala, nació de una donación promovida por la organización en favor de los
derechos de los animales People for the Ethical Treatment of Animals (PETA) que promueve una intensa campaña en el país
para proteger a los paquidermos.
El
elefante robótico "ayudará a que las ceremonias en los templos se lleven a
cabo de forma segura y sin crueldad, apoyando así la rehabilitación real de los
elefantes y la vida en los bosques, poniendo fin al horror del
cautiverio", explicó a EFE la oficina de comunicaciones de PETA India.
Con unos
11 pies de altura y un peso de 800 kilogramos, el elefante-robot, llamado Irinjadappilly Raman, es capaz
de transportar hasta cinco personas y sus movimientos pueden controlarse con un
mando.
PETA
espera que esta iniciativa se extienda por otros estados de la India para
abandonar la habitual práctica de estas criaturas en los rituales
hindúes, donde en ocasiones se
utilizan para transportar a los dioses en procesiones y ceremonias,
entrenados a costa de maltrato.
La
población de elefantes asiáticos se concentra en el sur de la India, donde
habitualmente son retenidos o transportados de forma ilegal a otras regiones, y
a menudo mueren por estar encadenados durante largas horas sin acceso a agua o
a la atención veterinaria.
Un grupo
en favor de los derechos de los animales instó recientemente a las autoridades
estatales a iniciar una investigación sobre las frecuentes muertes de
elefantes.
El Centro de Investigación sobre los Derechos de los Animales (CRAR) registró la muerte de 138 elefantes cautivos entre 2018 y 2023 solo en Kerala.