EFE
Cartagena,
Colombia
El
musicólogo y pianista italiano Giovanni Bietti dijo este domingo que el
nacionalismo europeo influyó en la música de todo el mundo y manifestó también
que "compositores como Frédéric Chopin, Franz Liszt o Antonín Voryak" se
convirtieron en un modelo" de influencia global.
Bietti,
que ofrece todos los días un coloquio-concierto sobre los compositores que son
interpretados en el Festival Internacional de Música de Cartagena,
dijo a Efe que estos compositores no solo representan un estilo de composición
"sino también de cómo es posible representar una cultura y una identidad
cultural a través de la música".
"En
la mitad del siglo XIX las grandes tradiciones las imponían los austrohúngaros
con composiciones instrumentales, pero también estaban la ópera italiana
y el ballet francés. Así que cada compositor a su manera tuvo que
tratar estas tradiciones y tomar algo de cada una y ver la manera de
diferenciarse de ellas", explicó.
Agregó:
"Por supuesto que aquí en Colombia ocurrió lo mismo, tuvimos (compositores
como) Adolfo Mejía y Antonio María Valencia escribiendo pasillos y bambucos
pero también escribieron cuartetos para cuerdas, tríos y sonatas".
IMPORTANCIA DEL NACIONALISMO
Mucha de
la música europea, particularmente de la segunda parte del siglo XIX, no era
exactamente nacionalista pero sí estaba involucrada en "el ascenso
del nacionalismo", por lo que "claramente compositores de
diferentes países de Europa del este sintieron que tenían que dar voz a las
aspiraciones de la gente".
"Por
ejemplo los polacos estaban dominados por los rusos, los checos estaban
bajo la influencia del imperio austrohúngaro y esencialmente
comenzaron a buscar una inspiración nacionalista en los bailes y las melodías
folclóricas, pero se dieron cuenta de que eso no era suficiente para crear una
real música nacionalista", explicó Bietti.
Es por
ello que considera que "lo más importante de la llamada escuela
nacionalista es que la mayoría de estos compositores deliberadamente hicieron
un compromiso entre la música local y la música más conocida de la tradición
austrohúngara".
"La
tradición alemana era la forma en que podías tener un gran estilo, entonces
si querías tener un gran estilo checo tenías que escribir una sinfonía y la
sinfonía es una fórmula musical alemana", agregó.
Por ello
considera que "el nacionalismo influenció mucho, pero los compositores
para destacarse y para lograr que el nacionalismo no se volviera la formula
general usaron sus propias influencias".
Bietti
considera que en las obras de muchos de los compositores se puede ver que al
final del siglo XIX el enfoque era nacionalista, pero cree que para Dvorák
"muchas veces este enfoque nacionalista era puro mercadeo".
El tema
central de la edición XVII de este festival de música se denomina "El
canto de la tierra: Música entre nacionalismo y cosmopolitismo en el siglo
XIX".
El
festival continúa explorando el nacionalismo en las obras de compositores como
Bedrich Smetana (1824-1884), Leoš Janácek (1854-1928), Joseph Suk (1874-1935),
Pancho Vladigerov (1899-1978), George Enescu (1881-1955), Bela Bartok
(1881-1945), Ciprian Porumbescu (1853-1883), Erno Dohnanyi (1877-1960), Zoltan
Kodaly (1882-1967), Gyula Beliczay (1835-1893) y Johannes Brahms (1833-1897).
También
abordará el nacionalismo en la música colombiana y culminará el próximo 13 de
enero.