Las manifestaciones contra el alto costo
de la vida, la escasez de combustible y para exigir la renuncia del primer
ministro Ariel Henry continúan en las regiones. Al igual que la semana
pasada, las ciudades de Miragoane, Petit Goâve, Jacmel, Cap-Haitien, etc. Comenzó
una segunda semana consecutiva de disputas. Se registran al menos dos
muertos y decenas de heridos.
Una persona se
asfixió después de inhalar gases lacrimógenos lanzados por la policía mientras
estaba en su casa en Petit-Goâve el lunes por la noche. La información fue
confirmada por el comisionado del gobierno Elliote Pierre Paul, contactado por
Le Nouvelliste. El mismo día, informa el reportero gráfico Richard
Pierrin, un manifestante fue herido de bala. Este es Wilbert Ticine. Por
ahora, la víctima está siendo atendida en un hospital de Carrefour. Tendrá
que someterse a una cirugía. En el proceso, Pierrin informa que se han
registrado más de una decena de heridos desde el lunes 29 de agosto. La
mayoría fueron alcanzados con balas de goma.
Miles de
manifestantes salieron a las calles de Jacmel este miércoles para el tercer día
de movilización de la semana. El corresponsal de Nouvelliste en el lugar
informó que la manifestación transcurrió pacíficamente. “La manifestación
de este 31 de agosto recorrió las principales arterias del centro de Jacmel y
la periferia, exigiendo al gobierno de turno que respete los derechos
fundamentales de las personas, entre ellos el derecho a la seguridad, la
energía eléctrica y la alimentación. Durante las seis horas, los
manifestantes mantuvieron la calma. Exigieron el cierre de las puertas de
todos los bancos de Jacmel y la administración del centro eléctrico
semiautónomo de Jacmel. Como resultado, un policía salió herido y 5
manifestantes fueron detenidos”, informó Pierre Paul Ancion.
En Cabo Haitiano, miles de manifestantes volvieron a tomar las calles el miércoles. El exsenador Jean Charles Moïse fue señalado como líder de la marcha, según las observaciones de nuestro corresponsal Gérard Maxineau. La procesión rodeó la ciudad antes de dirigirse a Carefour en el aeropuerto de Cap-Haitien, donde una mujer de 24 años, Joselita Marcelin, fue asesinada el martes.
Testigos
acusan a un agente de la PNH de haber cometido el crimen. Jean Charles
Moïse prometió hacer todo lo posible para hacer justicia a la víctima. Condicionó
el fin de las manifestaciones a la apreciación de la gourde frente al dólar ya
la revocación de la circular del BRH que establece que los beneficiarios de
transferencias del exterior deben recibir sus montos en gourde. Los
manifestantes, muy molestos, lanzaron piedras a gasolineras, bancos y
casas de cambio. La tensión reinó durante toda la tarde en Cabo
Haitiano.
Tras una semana
de manifestaciones, bloqueos y enfrentamientos entre manifestantes y policías,
la calma ha vuelto a la ciudad de Les Cayes. Se han reanudado las
actividades en la ciudad de Antoine Simon. Sin embargo, este miércoles se
levantó una barricada en Boury, distrito situado en la carretera que conduce a
la costa sur.
Las actividades
también se reanudaron este miércoles 31 de agosto en Miragoâne. El comercio
y el transporte público han retomado sus derechos en la capital del
departamento de Nippes. Han operado instituciones públicas y privadas,
incluyendo bancos comerciales. Sin embargo, las puertas de ciertas
instituciones permanecieron cerradas, informó nuestro corresponsal en Nippes,
Yoco Lortéus.
El editor
recuerda que una situación de pánico reinó el martes 30 de agosto en el centro
de la ciudad de Miragoâne, se lanzaron piedras tras una intervención de la
policía que lanzó gases lacrimógenos para dispersar una manifestación. Los
parabrisas de tres vehículos quedaron destrozados. El periódico intentó en
vano tener una reacción de la policía sobre las diversas intervenciones
musculares registradas en las diversas manifestaciones. Por: Senado Jean
Daniel, para Le Nouvelliste