AP
Washington
Un hombre
armado con un fusil AR-15 murió en un tiroteo luego de que trató de
irrumpir en las oficinas del FBI en Cincinnati. Un individuo de
Pensilvania fue arrestado después que publicó amenazas de muerte contra los
agentes en las redes sociales. En el ciberespacio, los llamados a
levantamientos armados y una guerra civil son cada vez más fuertes.
Esto
podrÃa ser sólo el principio, advirtieron autoridades federales y observadores
privados del extremismo. Un número cada vez mayor de fervientes partidarios de
Donald Trump parece dispuesto a contraatacar al FBI o a otros que, según ellos,
van demasiado lejos al investigar al expresidente.
Las
fuerzas del orden de todo el paÃs están advirtiendo y siendo advertidas sobre
un aumento de las amenazas y la posibilidad de ataques violentos contra agentes
o edificios federales a raÃz del allanamiento del FBI a la finca Mar-a-Lago de
Trump.
Los
expertos que estudian la radicalización y la desinformación en internet —como
las afirmaciones falsas de Trump sobre unas elecciones robadas—
señalaron que el reciente aumento fue provocado por el allanamiento de la casa
de Trump en Florida. Pero, ¿qué podrÃa ocurrir en caso de que se produzcan
detenciones o acusaciones?
“Cuando
los mensajes alcanzan un determinado tono, empiezan a suceder cosas en el mundo
real”, dijo el exfiscal general de Nueva Jersey, John Farmer, quien ahora
dirige el Instituto Eagleton de PolÃtica de la Universidad de Rutgers. “Y
cuando las personas en posiciones de poder y confianza pública empiezan a
hacerse eco de la retórica extremista, es aún más probable que veamos
consecuencias en el mundo real”.
Amplificadas
por los medios de comunicación de extracción derechista, las airadas
afirmaciones de Trump y sus aliados sobre el allanamiento están avivando el
fuego de la desconfianza de sus partidarios hacia el gobierno federal en
general y hacia el FBI en particular —aunque esté dirigido por un
hombre que fue designado por Trump_. Y al menos algunos de los simpatizantes de
Trump parecen estar ahora actuando como resultado de su ira.
La semana
pasada, un hombre con ropa táctica blindada y armado con un fusil de asalto y
una pistola de clavos intentó irrumpir en la oficina del FBI en Cincinnati.
Posteriormente fue abatido por la policÃa tras intercambiar disparos con los
agentes. Las autoridades dijeron que creen que el hombre habÃa publicado
mensajes fuertes en Truth Social, la plataforma en internet de Trump,
incluyendo uno que decÃa que los agentes federales deberÃan ser asesinados.
Otro
hombre condujo su automóvil contra una barricada del Capitolio de
Estados Unidos el domingo y comenzó a disparar al aire antes de pegarse un
tiro.
El lunes,
el Departamento de Justicia anunció la detención de un hombre de Pensilvania
que habÃa amenazado repetidamente la vida de los agentes del FBI en Gab, una
plataforma popular entre los partidarios de Trump.
“Nos han declarado la guerra y ahora es temporada de caza contra
ustedes”,
escribió en una publicación compartida por las autoridades.
Un
boletÃn de inteligencia conjunto del FBI y del Departamento de Seguridad
Nacional advierte de un aumento en las amenazas violentas en internet contra
funcionarios federales e instalaciones gubernamentales. Entre ellas se incluye
“una amenaza de colocar una supuesta bomba casera frente a la sede del FBI”,
junto con llamados a una “guerra civil” y a la “rebelión”, según una copia del documento
obtenida por The Associated Press.
Las
menciones a la “guerra civil” en plataformas como Facebook y Twitter se
multiplicaron por 10 en las horas inmediatamente posteriores al registro de
Mar-a-Lago de la semana pasada, según un análisis de Zignal Labs, una empresa
que analiza el contenido de las redes sociales.
Muchas de
las publicaciones contenÃan afirmaciones sin fundamento que insinuaban que el
presidente Joe Biden ordenó al FBI allanar la casa de Trump, o que el FBI
plantó evidencia para incriminar a Trump.
“Que
Biden enviara al FBI para allanar la casa del expresidente, el señor Donald
Trump, es una declaración de guerra contra él y sus partidarios”, escribió una
persona en Telegram.
El
boletÃn de inteligencia también señalaba que oficiales policiales federales han
identificado varias amenazas contra funcionarios del gobierno que participaron
en el registro de Mar-a-Lago, incluidos llamamientos para matar al juez de
primera instancia que firmó la orden de allanamiento.
Los
nombres y direcciones de los agentes del FBI y de otros funcionarios han sido
publicados en internet, junto con referencias de familiares que podrÃan ser
otros blancos, de acuerdo con los documentos de inteligencia.
Las
amenazas son inquietantemente similares a la retórica en internet que precedió
a la insurrección del 6 de enero de 2021 en el Capitolio federal, señaló el
representante demócrata Bennie Thompson, quien preside la comisión de la Cámara
de Representantes que investiga el asalto al Capitolio y la Comisión de Seguridad
Nacional.
“Estas
amenazas de violencia e incluso de guerra civil —procedentes predominantemente
de extremistas de derecha en internet— no sólo son antiestadounidenses, sino
que son una amenaza para nuestra democracia y el estado de derecho”, dijo
Thompson.
El
registro de la residencia de Trump se ejecutó sobre la base de una orden
judicial legalmente obtenida y firmada por un juez. Pero eso no le interesa a
Trump y sus aliados.
“Esto es
un ataque contra un oponente polÃtico a un nivel nunca antes visto en nuestro
paÃs”, escribió Trump el lunes en Truth Social. ”¡Tercer mundo!”
El
representante republicano Paul Gosar equiparó la investigación con la “tiranÃa”
y tuiteó: “Debemos destruir el FBI”.
Otro
congresista republicano, Andy Biggs, trató de culpar en parte a los agentes
individuales que ejecutaron el registro. “Esto parecÃa más bien algo que se
verÃa en la antigua Unión Soviética”, comentó Biggs esta semana. ”¿Por qué
todos esos agentes se prestaron voluntariamente a ello?”
El
senador republicano John Thune dijo el martes a los periodistas en Sioux Falls,
Dakota del Sur, que aunque el Departamento de Justicia ha demostrado que siguió
los protocolos legales para obtener la orden de registro, su reserva sobre la
investigación de Trump ha hecho que la gente cuestione los motivos de las
fuerzas del orden.
“Hay
muchas preguntas sin respuesta que, dejadas al vacÃo, crean muchas sospechas
entre el pueblo estadounidense, y lo único que no quieres es que la gente no
confÃe en las fuerzas del orden”, señaló Thune.
Otros
republicanos han tratado de moderar la retórica, como hizo el gobernador de
Arkansas, Asa Hutchinson, durante una aparición el fin de semana en la cadena
CNN. “Tenemos que dejar de juzgarlos”, dijo Hutchinson sobre los agentes. “El
FBI simplemente está cumpliendo con sus responsabilidades según la ley”.
Pero
muchos en los medios de comunicación conservadores no han prestado atención a
ese consejo.
“El
allanamiento en Mar-a-Lago no fue un acto de aplicación de la ley, fue lo
contrario a eso”, comentó Tucker Carlson en su programa de Fox News el lunes
por la noche. “Fue un ataque al estado de derecho”.
Fox
también compartió una fotografÃa manipulada en la que aparecÃa falsamente el
juez que firmó la orden recibiendo un masaje de pies de Ghislaine Maxwell.
Maxwell fue condenada en junio a 20 años en prisión por ayudar a su novio
Jeffrey Epstein a abusar sexualmente de menores de edad. La foto original no
era del juez, sino de Epstein, quien se suicidó en 2019 mientras aguardaba su
juicio. Brian Kilmeade, de Fox News, dijo más tarde que la imagen adulterada
fue compartida como broma.
Las
raÃces de la ira republicana contra el FBI se remontan a las elecciones de 2016
y a las investigaciones sobre los supuestos vÃnculos de la campaña de Trump con
Rusia y sobre el manejo de material clasificado por parte de Hillary Clinton en
una cuenta de correo electrónico privada. Esa furia no ha hecho más que
aumentar a medida que las nuevas investigaciones se centran en Trump, sus
intentos de anular las elecciones de 2020 y su manejo de material clasificado
desde que dejó el cargo.
Las
afirmaciones infundadas de que el FBI inculpó en secreto a los partidarios de
Trump por sus acciones violentas del 6 de enero también avivaron la ira de los
usuarios conservadores en las redes sociales.
“Bueno
muchachos, ustedes empezaron esta guerra civil”, escribió un usuario en
Gab, “y otros van a terminarla por ustedes”.