Volodymyr Zelensky (Reuters)
El presidente ucraniano alertó que
Vladimir Putin alista una ofensiva contra la estratégica ciudad de un millón de
habitantes
Las tropas rusas se preparan para bombardear Odessa, un ciudad estratégica y
principal puerto de Ucrania, advirtió este domingo el presidente ucraniano,
Volodimir Zelensky.
“Será un crimen
militar. Será un crimen histórico”, declaró Zelensky en un mensaje por
video, en momentos en que el ejército ruso, procedente de Crimea, continúa
avanzando en el sur de Ucrania.
Las fuerzas invasoras han estado alistando un desembarco
anfibio. Transportan una fuerza de casi 3.000 soldados y más de 100 tanques y
helicópteros, ya que tiene una importancia
estratégica excepcional. Si cae en manos rusas, Vladimir Putin
controlaría prácticamente toda la zona costera del Mar Negro y Ucrania quedaría
sin acceso marítimo.
Vladimir Putin ha hablado varias veces con nostalgia de
la reconstitución de la Nueva Rusia de la época imperial, con una región a lo
largo del Mar Negro centrada en Odessa.
Casi un millón de personas viven en Odesa, un puerto
cosmopolita en la costa sur de Ucrania con hablantes de ucraniano y ruso y
minorías búlgaras y judías.
El avance ruso desde la
península ocupada de Crimea ha girado en parte hacia el este para enlazar con
los separatistas respaldados por Rusia y tomar el puerto de Mariupol en el mar
de Azov.
Pero otra parte de las fuerzas también se ha dirigido al
oeste, a Kherson, en la carretera hacia Odessa. La ciudad también está cerca de
la frontera con Moldavia y de la región de Transnistria, ocupada por Rusia.
Según se desprende del despliegue de unidades rusas, en Odessa no se van a registrar las típicas escenas como las del desembarco de Normandía, con lanchas llegando a las playas bajo un fuego cruzado de artillería, abriendo sus compuertas y escupiendo soldados que corren para enterrarse en la arena. En cambio, las lanchas de desembarco llegan protegidas por helicópteros artillados y no van a parar a una caleta perdida. Buscan las zonas portuarias ya despejadas por el bombardeo de los cazas y los soldados bajan con facilidad.
Estructuras antitanques en Odessa (Reuters)
En los últimos días, los trabajadores del sistema de
tranvías que circula por la ciudad se
dedicaron a cortar viejos rieles para armarlos en cruz. Son las que en la
jerga militar se conocen como las barricadas “puercoespín” que pueden detener
el avance de los tanques. También son útiles para complicar el desembarco en la
zona costera frente al centro de la ciudad.
Durante los primeros 11 días del conflicto, las fuerzas
rusas de Bielorrusia también han avanzado sobre la capital, Kiev, desde el
noroeste y el noreste, mientras que otro grupo bombardeaba la ciudad norteña de
Kharkiv.
Varias ciudades han sido bombardeadas y bombardeadas y la
ONU calcula que más de 1,5 millones de civiles han sido expulsados de sus
hogares por los combates.
(Con información de AFP y
EFE)