Apoyada por la mayoría del Consejo de Seguridad
La resolución llamaba a Rusia a detener la ofensiva y a retirar total e incondicionalmente sus tropas a sus fronteras internacionalmente reconocidas y a que se abstuviera de toda nueva amenaza y uso ilegal de la fuerza contra cualquier Estado de la ONU. Tras la votación el Secretario General afirmó que “las Naciones Unidas nacieron de la guerra para acabar con la guerra. Hoy ese objetivo no se conseguido. Pero no debemos rendirnos. Debemos dar una oportunidad a la paz”.
El veto de la Federación de Rusia
ha impedido este viernes aprobar una resolución del Consejo de Seguridad que condenaba la ofensiva que el
presidente Vladimir Putin ha lanzado sobre Ucrania y que contó con el voto a
favor de 11 de los 15 miembros del Consejo de Seguridad, y tres abstenciones.
El documento pedía a la
Federación de Rusia “el cese inmediato del uso de la fuerza contra Ucrania y que se
abstuviera de toda nueva amenaza o uso ilegal de la fuerza contra cualquier
Estado miembro de las Naciones Unidas”.
También exigía que Rusia retirase
inmediata, total e incondicionalmente todas sus fuerzas militares del
territorio de Ucrania dentro de sus fronteras internacionalmente reconocidas,
y reafirmaba el compromiso del Consejo de Seguridad con la soberanía, la
independencia, la unidad y la integridad territorial de Ucrania dentro de sus
fronteras internacionalmente reconocidas.
La resolución, que se producía
bajo el capítulo VII de la Carta de las Naciones Unidas que permite al Consejo
tomar las medidas necesarias para restablecer la paz y la seguridad, incluido
el uso de la fuerza militar, obtuvo el voto a favor de Albania, Brasil, Gabón,
Ghana, Kenia, Estados Unidos, Francia, Gran Bretaña, Irlanda, México y
Noruega. Se abstuvieron China, India y los Emiratos Árabes Unidos.
Rusia votó en contra.
El voto negativo de cualquiera de
los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad -China, Estados Unidos,
Francia, Reino Unido y Rusia, las cinco potencias nucleares- significa de hecho
el veto sobre la resolución, lo que impide que el Consejo de Seguridad pueda
actuar en los términos en que se solicitaba en el texto.
El documento condenaba también la decisión de Rusia de reconocer las regiones ucranianas de Donetsk y Luhansk y le exigía revertirla.
Las Naciones Unidas nacieron de
la guerra para acabar con la guerra
Nada más concluir la reunión, el Secretario General de la ONU hizo
una declaración a la prensa en la que lamentaba el hecho de que el Consejo de
Seguridad no pudiera actuar.
“Las Naciones Unidas nacieron de
la guerra para acabar con la guerra. Hoy ese objetivo no se conseguid. Pero no
debemos rendirnos. Debemos dar una oportunidad a la paz. Los soldados
deben regresar a sus barracones y los líderes deben volver al camino del diálogo
y la paz”, aseguró.
También dijo que la Carta de las
Naciones Unidas ha sido desafiada en el pasado, pero siempre se ha mantenido
firme en el lado de la paz, la seguridad, el desarrollo, la justicia, la ley
internacional y los derechos humanos.
“Una y otra vez, cuando la
comunidad internacional se ha unido en solidaridad, esos valores han
prevalecido. Y prevalecerán, independientemente de lo que ocurra hoy. Debemos
hacer todo lo que esté en nuestras manos para que prevalezcan en Ucrania, pero
también para que prevalezcan para toda la humanidad”.
Vetarán la resolución, pero no
nuestra voz
Durante la reunión y tras la
votación, la primera en reaccionar a la votación del Consejo de Seguridad, fue
la representante de Estados Unidos quien dijo: “Pueden vetar la resolución,
pero no pueden vetar nuestra voz, no pueden vetar la verdad, no pueden vetar
nuestros principios, no pueden vetar al pueblo de Ucrania, no pueden votar la
Carta de la ONU y no pueden vetar la rendición de cuentas".
A continuación, aseguró
que la situación en Ucrania se examinará ahora en la Asamblea General,
“donde el veto de Rusia no cuenta y las naciones del mundo pueden, y lo harán,
pedir cuentas a Rusia, y solidarizarse con Ucrania".
El embajador de México, por su
parte, explicó que su país votaba a favor de la resolución “porque estamos
viendo como un país agrede otro”, lo que supone una amenaza a la paz y a la
seguridad, tal y como está recogido en la Carta de las Naciones Unidas.
Añadió que también votaba a favor
porque México ha sido invadido cuatro veces, dos por Francia y dos por Estados
Unidos, porque México siempre ha estado en contra de los actos de agresión,
siempre ha estado en contra del uso de la fuerza, y su política exterior es
Ucrania debe ser un puente entre
Explicando su abstención, el
embajador chino explicó que “la seguridad de un país no debe venir a expensas
de la seguridad de otros países (…) En el contexto de cinco expansiones de la
OTAN, las legítimas aspiraciones de Rusia deben ser consideradas y deben ser
tratadas apropiadamente”.
“Ucrania debe ser un puente entre
el este y el oeste y no convertirse en una avanzada para la confrontación de
las grandes potencias”, añadió.
Después, concluyó que la
solución final de la crisis de Ucrania requiere abandonar a la mentalidad de la
Guerra Fría y dar atención y respeto a las legítimas preocupaciones de
seguridad de todos los países, y llevar a cabo negociaciones que construyan
un balance un efectivo y sostenible, y un mecanismo de seguridad europeo.
Resolución antirrusa y
antiucraniana
Por su parte, el
embajador ruso calificó la resolución de “antirrusa y antiucraniana”. A
continuación, dijo que no explicaría porque era antirrusa pues, en su opinión,
era evidente, pero sí comentó que era antiucraniana porque “trata de cementar
un sistema de poder que ha traído al país a un punto de tragedia que dura ocho
años”.
Después, explicó que el voto en
contra de Rusia “no es por lo que contiene la resolución sino por lo que deja
fuera”.
“Si quienes han patrocinado la
resolución hubieran tenido remotamente la intención de hacer una resolución
equilibrada, no habrían dejado fuera asuntos que necesitan ser tratados y no
pueden ser omitidos”, entre los que mencionó “el golpe de Estado de 2014” que
“lanzó una guerra contra el este del país, bombardeando áreas residenciales”.
"La responsabilidad de lo
que está ocurriendo en Ucrania la tiene ustedes. El proyecto de resolución
de hoy es otro intento brutal e inhumano de dar otro paso más en el tablero
ucranio", argumentó.
Ucrania no se rendirá
En su turno ante el Consejo de
Seguridad, el representante permanente de Ucrania agradeció a las delegaciones
que votaron a favor del proyecto de resolución y pidió un momento de silencio
para honrar la memoria de los muertos.
"Anoche se vivió la noche
más horrenda para Kiev desde 1941, desde los ataques de los nazis. Anoche nos
atacó quien pretende estar luchando contra los neonazis. Rusia desea seguir con
sus acciones nazis", afirmó el embajador ucraniano, antes de añadir:
"nada justifica los ataques contra hospitales y guarderías”.
El representante de Kiev
advirtió, no obstante, que no habrá en su país hospitalidad de las tropas
rusas. "Pueden detener la votación en esta sala, pero ¿pueden detener una
guerra? Por desgracia, habrá miles de cuerpos de soldados rusos que serán
enviados a sus madres. No tenemos otra opción. Debemos defender nuestro
territorio. No nos rendiremos".
Después concluyó asegurando que
el pueblo ruso merece la paz, la libertad y la democracia.
La ONU entrega ayuda humanitaria
En su intervención ante la
prensa, el Secretario General indicó que “hoy en Ucrania, a pesar de los
crecientes desafíos operativos, la ONU está aumentando la entrega de ayuda para
salvar vidas, incluso en la parte oriental del país, a ambos lados de la línea
de [contacto]”.
Reconoció que las
necesidades humanitarias se multiplican y se extienden cada hora, que los
civiles están muriendo y que al menos 100.000 ucranianos han huido ya de sus
hogares, de los que muchos han cruzado la frontera de los países vecinos, lo
que subraya el carácter regional de esta crisis creciente.
Para reforzar nuestra
respuesta, Guterres anunció que ha nombrado a Amin Awad Coordinador de Crisis
de la ONU para Ucrania.
Recordó que todas las partes
implicadas en este conflicto deben respetar el derecho internacional
humanitario y garantizar la seguridad, y la libertad de movimiento del personal
de la ONU y de otros trabajadores humanitarios.
“Especialmente en un momento como éste, es importante recordar que la ONU no es sólo la cámara que está detrás de mí. Son decenas de miles de mujeres y hombres de todo el mundo. Alimentando a los hambrientos. Vacunando a los niños. Promoviendo el desarrollo. Protegiendo a los civiles en las operaciones de mantenimiento de la paz. Mediando en conflictos. Apoyando a los refugiados y a los inmigrantes. Promoviendo los derechos humanos. Manteniendo, entregando y extendiendo una línea de vida de esperanza”, concluyó.