Dentro
de esta estructura se incluye las brigadas internacionales de las
Fuerza Conjunta de Muy Alta Disponibilidad, unos batallones de miles de
efectivos que apoyados por fuerzas aéreas, navales y de operaciones
especiales pueden desplegarse de urgencia para hacer frente a crisis
militares.
Alemania aportará más soldados y sistemas
de armamento para proteger a sus socios de la OTAN en Europa del Este, según ha
confirmado este viernes la ministra de Defensa, Christine Lambrecht, en
declaraciones a la agencia de noticias DPA.
El
objetivo común, según Lambrecht, es reforzar la “disuasión” y enviar “una señal
de alto” al presidente de Rusia, Vladimir Putin. “En la OTAN observamos
con gran preocupación que (Putin), en su declaración de guerra, también amenazó
encubiertamente con utilizar armas nucleares”, ha apuntado, antes de
asegurar que, no obstante, los aliados han demostrado “con la disuasión, con
unidad y clara posición” que no se dejarán “intimidar”.
“Un
ataque a un aliado sería un ataque a todos nosotros, con terribles
consecuencias para Rusia. Putin también lo sabe”, ha agregado Lambrecht.
Este
sábado está previsto que zarpe el buque de reconocimiento de la marina ‘Alster’
al mar Báltico. “También desplegaremos una fragata y una corbeta, estamos
preparando más y nos involucraremos en la vigilancia y la defensa aérea”, ha
puntualizado Lambrecht, que ha incidido en que Alemania es “un socio fiable de
la OTAN”.
Según
información a la que ha tenido acceso DPA,
los planes prevén la llegada a Eslovaquia de los sistemas alemanes de
defensa antiaérea ‘Patriot’. La mayor protección del espacio aéreo solicitada
por los socios bálticos de la OTAN, como Lituania, se llevará a cabo desde
los buques del mar Báltico.
Eslovaquia
también solicitó un grupo de combate de la OTAN dirigido por Alemania, como el
que existe en Lituania. Sin embargo, según el estado actual de la
planificación, Alemania probablemente participará primero en una unidad de la
OTAN anunciada por Francia en Rumanía.