EFE
Santo Domingo, RD.- El grupo armado más poderoso de Haití, G9 an Fanmi e Alye, anunció este viernes una tregua de una semana de duración para facilitar la distribución de combustible.
El líder de G9 an Fanmi e Alye, Jimmy Chérizier, alias Barbecue, anunció
en una rueda de prensa que su banda desbloqueará el acceso a la terminal
petrolera de Varreux, en la zona portuaria de Puerto Príncipe, y cesará sus
ataques a los camioneros.
"La vida debe volver a la normalidad como antes", dijo
Barbecue en una conferencia de prensa celebrada en La Saline, una barriada en
el centro de Puerto Príncipe que está controlada por su banda.
El capo explicó que se concede la tregua por ser la víspera del 218
aniversario de la batalla de Vertières, que tuvo lugar el 18 de noviembre de
1803.
Barbecue invitó a los haitianos a "meditar" sobre el valor de
esa efeméride, que conmemora la última batalla de la revolución haitiana, en la
que los habitantes de la entonces colonia francesa derrotaron a las tropas
napoleónicas.
"Esta tregua-reflexión es para demostrar nuestra buena fe, nuestro
sentimiento y amor por nuestros hermanos del país", dijo Barbecue al leer
un comunicado de tres páginas.
El cabecilla del G9 invitó a los haitianos a reflexionar sobre su
petición de dimisión del primer ministro haitiano, Ariel Henry, del que dijo
que es "incapaz" de gestionar el país.
Barbecue acusa al primer ministro de "participar en el asesinato
del presidente Jovenel Moise", perpetrado por un comando de mercenarios el
7 de julio pasado.
El G9 bloquea la distribución de combustible desde mediados de
septiembre, lo que ha causado un desabastecimiento que se ha ido agravando con
el paso de las semanas, lo que ha obligado a cerrar muchas empresas e
instituciones que usan generadores eléctricos de gasóleo.
A pesar de que desde hace dos semanas la Policía haitiana ha comenzado a
escoltar los camiones cisterna, para retomar la distribución de carburante a
los hospitales y a algunas gasolineras, el desabastecimiento continúa siendo
generalizado en el país.
Esta última semana se han producido varios enfrentamientos entre el G9 y
la Policía en las inmediaciones del Palacio Nacional, sede del poder Ejecutivo
en este país caribeño, pero que está vacante desde el magnicidio.