AFRIN, Siria (AP) — La cantidad de muertes por el impacto de
artillería en un hospital del norte de Siria ha subido a 21, informaron el
domingo fuentes médicas.
Otras 43 personas resultaron lastimadas en el ataque en el
Hospital Al-Shifaa del poblado Afrin.
El cañoneo ocurrido el día anterior dejó inhabilitados a la unidad
de maternidad y el quirófano del hospital.
No quedaba claro quién lanzó el proyectil, que provino de una zona
donde operan fuerzas oficialistas sirias pero también guerrilleros kurdos.
El lugar está en un área controlada por milicias de la oposición siria apoyadas por Turquía.
Gran parte del techo del hospital se hundió y se veían los cables
retorcidos en uno de los corredores. Los sectores más impactados fueron la sala
de partos, la sala pediátrica y la sala de primeros auxilios. Se veían las
camas cubiertas de escombros.
En el piso yacían manchas de sangre, en medio de una silla de
ruedas y una camilla ensangrentada.
El director del hospital, doctor Hussam Adnan, narró que dos
proyectiles impactaron a la sala de maternidad y al quirófano, y que un cohete
hizo impacto en la clínica.
Los pacientes fueron evacuados a otro hospital, añadió.
“Este es un acto terrorista, perpetrado contra civiles inocentes”,
dijo Adnan, añadiendo que el hospital sirve al poblado de Afrin y sus
alrededores, donde viven unas 350.000 personas.