SANTO DOMINGO. El director ejecutivo del Consejo Nacional para el VIH y el Sida (CONAVIHSIDA), Víctor Terrero, afirmó que la República Dominicana concentrará los esfuerzos de los programas de VIH en fortalecer los logros alcanzados en los últimos años.
“Tras lograr una reducción de 60 por ciento de la mortalidad asociada a la epidemia, sostuvo el funcionario, el país dedicará sus esfuerzos a fortalecer esos logros y a mejorar los indicadores de la epidemia para el año 2020”.
Según un comunicado de prensa, Terrero intervino en un taller sobre el desarrollo de nuevas estrategias de sostenibilidad financiera que sentó en la mesa de discusión a ONUSIDA, USAID, el Servicio Nacional de Salud, CONAVIHSIDA, Dirección General de Control de Infecciones de Transmisión Sexual y Sida (DIGECITSS) y organizaciones de la sociedad civil.
Otro reto citado por el funcionario es seguir reduciendo las nuevas infecciones por VIH.
Según Terrero, la República Dominicana logró reducir en 10 por ciento las nuevas infecciones debido a la ejecución de los programas de prevención.
Resaltó que los programas de VIH en el país se han fortalecido luego que el gobierno asumiera el costo total de la compra de los medicamentos y reiteró que para el año 2018 ya han sido destinados 600 millones de pesos para los mismos.
“El tema del VIH es de alta prioridad en la agenda de la actual administración, que lo ha incluido entre sus programas protegidos y ha iniciado el camino hacia la sostenibilidad financiera”, puntualizó.
Bethania Betances, directora de país de ONUSIDA, favoreció que se mantenga la inversión en VIH a largo plazo para que la sostenibilidad financiera sea efectiva. “Hay que identificar nuevas estrategias para que los programas de prevención y atención sean sostenibles en el tiempo y sigan teniendo impacto”, expresó.
Dijo que con el fortalecimiento de los programas de VIH los países tienen la oportunidad de mejorar los indicadores de la epidemia y alcanzar las metas previstas en la estrategia 90-90-90.
Esa estrategia busca que para el 2020 el 90 por ciento de las personas seropositivas conozca su condición serológica, que el 90 por ciento de estas accedan a tratamiento antirretroviral y que el 90 por ciento en tratamiento tenga la carga viral suprimida.
